PROGRESO.- La negligencia del dueño del Astillero Cuevas y del Catamarán que se quemó en ese lugar, ocasiona pérdidas al propietario del barco pesquero “Don Chelo II”, porque resultó afectado, pero no lo reparan, de modo que no puede salir a la pesca.
A mes y medio del siniestro, al armador Alejandro Montañez Rosado, dueño del barco “Don Chelo II” todavía no le pagan la indemnización ni reparan el barco, además de que ya no lo dejan entrar al Astillero Cuevas.
Nicolás León, administrador de esa nave recordó que el 16 de febrero pasado se registró un incendio en Astilleros Cuevas, ubicado en la zona industrial de Yucalpetén, y el fuego que se originó en el interior del catamarán propiedad de la empresa Tajoma alcanzó al “Don Chelo”. Las llamas consumieron la caseta de esa embarcación pesquera.
Dos semanas después se registró otro incendio en un yate, que también estaba estacionado en Astilleros Cuevas, y desde entonces el acceso a las instalaciones del astillero está controlado. El portón, que hasta antes del segundo incendio se mantuvo abierto, ahora permanece cerrado y un empleado destacado en la entrada solo permite la entrada a trabajadores que laboren en alguna embarcación.
El acceso a la prensa está prohibido, según dijo el empleado que se encuentra en la entrada del negocio.
Nicolás León señaló que también a él le niegan la entrada a Astilleros Cuevas, de modo que no sabe en qué condiciones se encuentra el barco “Don Chelo II”, y lo único que puede observar desde los muelles es que todavía se encuentra estacionado en ese lugar, pero no recibe mantenimiento.
El “Don Chelo”, al igual que el “Cristo Rey”, propiedad de Alejandro Montañez, entraron a Astillero Cuevas en plena veda del mero para que reciban mantenimiento general en el casco, pero a mediados de febrero se registró el incendio que afectó a “Don Chelo”. El “Cristo Rey” fue bajado del astillero y ya realizó su primer viaje de pesca.
Según Nicolás León, los daños al “Don Chelo” ascienden a más de $500,000, pues se tiene que retirar la caseta quemada, construir una nueva y darle mantenimiento general para que pueda zarpar a la pesca, pero como no le permiten la entrada al astillero y no pueden hacer nada, así que están a la espera que el dueño del catamarán quemado responda para que el pesquero sea reparado.